Uno de los principales atractivos de Formentera son sus caminos, que nos permiten llegar a los rincones más bellos de la isla. El más interesante es posiblemente el Camí de sa Pujada, también conocido como Camí Romà. Se trata del tramo final del antiguo camino de la Mola, que iba des de Sant Francesc Xavier hasta es Monestir.

El Camí vell de la Mola se puede empezar en Sant Francesc, pero el tramo final, es decir, el Camí de sa Pujada, se inicia en es Caló, siguiendo las señalizaciones. Sa Pujada, un recorrido de sólo 1.500 metros sin ninguna dificultad, se realiza aproximadamente en una hora y ofrece vistas panorámicas sobre la isla, costeando los espectaculares acantilados del Racó de sa pujada y atravesando un frondoso pinar. En días claros se observa también el perfil de la isla de Eivissa y de los islotes de es Vedrà y es Vedranell.

El camino, restaurado y declarado Bien de Interés Cultural (BIC) con la categoría de monumento, conserva restos del antiguo empedrado, así como diversos puntos de interés, entre los que destacan además de los miradores, «les petjades del diable» (las huellas del diablo), la antigua cantera de marés y la cruz grabada en el suelo rocoso.

VEN EN www.trasmapi.com

+INFO

IMG-20150430-WA0003

ap-escalo1