Al principio de la preciosa playa de Migjorn, a la altura de Ca Marí nos encontramos este carismático kiosko que pese a su corta edad (7 años) se ha convertido en uno de los lugares preferidos de los residentes de la isla.
Lo regentan el matrimonio formado por Elisabeth (Formentera) y Francisco (Cuenca) y su apuesta fue la de crear un lugar que evocara aquellos primeros chiringuitos de la Formentera más virgen y salvaje. Una vuelta a los orígenes.
Diríamos que lo que primero nos llama la atención de este Kiosko es su cercanía al mar, pero sin duda lo que nos hace venir una y otra vez es la banda sonora que acompaña a sus vistas.
El rock y el indie están a la orden del día y ese ambiente alternativo fuera del circuito comercial es la principal característica de este local y lo que lo convierte en la principal elección de aquellos que quieren disfrutar de una cerveza o una pomada sin necesidad de escuchar la canción del verano.
Una de sus especialidades es la Pomada, no en vano son el local que más Gin Xoriguer vende del mundo…ahí es nada.
Lo encontraréis abierto a diario durante el verano de 10 de la mañana hasta el anochecer. En invierno podréis disfrutar de este kiosko de viernes a domingo y festivos.