El próximo 30 de junio la deportista Tita Llorens cruzará a nado la
distancia que separa las islas de Formentera e Ibiza para recaudar
fondos a favor de los niños hospitalizados con los que trabaja la ONG
Proyecto Juntos.
La ONG junto a Insotel Hotel Group y Trasmapi han promovido este
desafío solidario dedicado especialmente a Leyre, una pequeña de 3
años que ha permanecido su primera infancia entre hospitales, y que
en esta ocasión representa a todos aquellos niños que siguen
pasando largas temporadas sometidos a tratamientos.
[Ibiza, 25 de junio de 2018] ▷ La deportista menorquina Tita Llorens salvará la distancia de 17.320 metros que separan las islas de Formentera e Ibiza. Lo hará para recaudar fondos a favor de los niños hospitalizados de larga duración que luchan contra graves enfermedades y con los que trabaja la ONG ibicenca, Proyecto Juntos.
La intrépida nadadora, de 50 años, recorrerá en solitario el Mediterráneo desde la playa Cala Saona en Formentera hasta la playa de Las Salinas en Ibiza en un reto deportivo solidario destinado a recaudar fondos para dar apoyo a familias con niños hospitalizados de Ibiza y Formentera. Los más de 17 kilómetros que separan ambas islas serán un punto de unión para esta causa, los niños hospitalizados y sus familias, por los que la ONG lleva trabajando más de tres años.
Inspirados en una historia de superación
En esta ocasión, el desafío solidario promovido por la ONG, INSOTEL HOTEL GROUP Y TRASMAPI y que cuenta con la colaboración de BESO BEACH, estará especialmente dedicado a Leyre, una valiente ibicenca de 3 años que permaneció los primeros años de su vida hospitalizada. Allí aprendió a hablar y caminar. Hoy la pequeña por fin puede disfrutar de la su infancia lejos de las salas de hospital, visitándolas únicamente para revisiones periódicas.
Como Leyre, todavía son muchos niños los que siguen pasando largas temporadas sometidos a duros tratamientos lejos de su entorno. Desde Proyecto Juntos les asisten con voluntariado hospitalario/domiciliario, apoyo emocional como con atención psicológica, pero también les dan soporte económico: alojamiento, ayudas para desplazamientos, terapias, prótesis, apoyo escolar…
Tita Llorens nadará desde Formentera a Ibiza a favor de los niños hospitalizados
Tal y como apunta Carlos Ramón, fundador de Proyecto Juntos, «preocuparse únicamente en reír y jugar debería ser imperativo para todos los niños», motivo por el que han querido promover este evento deportivo solidario de la mano de Tita Llorens con el objetivo de seguir atendiendo a niños y adolescentes que luchan contra enfermedades graves o patologías crónicas.
El sábado 29 de junio se celebrará en Formentera una rueda de prensa para presentar la acción que tendrá lugar un día después. La hazaña deportiva comenzará el domingo 30 a las 8:00 de la mañana y finalizará entre las 13:00, 13:30 del mediodía en la playa de Las Salinas de Ibiza, concretamente en Beso Beach, con la llegada de la nadadora de Ciutadella donde la estará esperando Leyre y su familia.
Se han abierto dos vías de colaboración para realizar los donativos y colaborar con la iniciativa en la que todo lo recaudado irá íntegramente a Proyecto Juntos que destinará la ayuda recaudada al apoyo a familias desplazadas de Ibiza y Formentera por tratamiento a alguno de sus hijos.
Mi grano de Arena: https://www.migranodearena.org/reto/20293/nada-por-la-infancia-hospitalizada
Web Proyecto Juntos: https://proyectojuntos.org/producto/dona/
No es la primera vez que Tita Llorens realiza un reto a nado en el Mediterráneo. En julio del pasado año logró una hazaña histórica, se convirtió en la primera mujer en cruzar el canal marítimo que une Jávea con Ibiza. convirtiéndose de esta forma no solo en la primera mujer que atraviesa el canal marítimo entre la Península e Ibiza, sino en la primera persona en hacerlo con un bañador convencional. En total fueron más de 90 kilómetros a nado los que recorrió la nadadora balear.
Proyecto Juntos es la ONG Ibicenca que busca sensibilizar y poner el foco en los menores afectados por enfermedades de mediana y larga duración y aportar su granito de arena para mejorar la calidad de vida del enfermo pediátrico y de sus familiares, reduciendo las alteraciones emocionales, relacionales y sociales que puedan surgir como consecuencia de la enfermedad.